Mis comienzos

        Dicen que los comienzos son difíciles, puede ser. En mi caso, lo he visto como la evolución de un proceso que me ha llevado de una etapa a otra. 

        Comencé con un curso de pintura en seda, y después junto con una compañera seguimos practicando distintas técnicas hasta que nos lanzamos hacer nuestros primeros pañuelos. 

        !Mi primer pañuelo!, hecho con mucho cariño para mi amiga Pilar, una persona especial e importante en mi vida. A partir de aquí surgieron los primeros encargos. Todo un reto y a ello me lancé.

        Me encantaba experimentar, probar y sorprenderme con los diseños que iban saliendo. Realmente fue una etapa de descubrimiento en muchos sentidos: la textura y brillo de la seda, la elección y fijación de los colores así como el acabado final, todo ello da carácter a un proceso único y artesanal.

        Con el tiempo la seda y yo seguimos evolucionado, pero el color siempre será el protagonista de Lindavá. 

        Algunos diseños de los comienzos

         Modelo Nebulosa con aplicaciones

        

Modelo Duna

       Desde entonces, la pintura en seda se ha convertido en parte de mi vida, he conocido a personas extraordinarias que me han inspirado y apoyado, han surgido nuevos diseños y retos. Y sigo adelante, no sé a donde me llevará Lindavá, mientras tanto disfruto del camino.

        

       Abrazos de colores